Prepare este blog trip de dos días para que una escapada a Ámsterdam sea más cómoda y agradable. De esta forma sólo tenés que preocuparte de disfrutar de la ciudad.
El itinerario está elaborado en torno al supuesto de que llegués a Ámsterdam un viernes por la tarde y te quedés allí hasta el domingo. Si tu viaje no coincide con el fin de semana, deberás comprobar los horarios de apertura de los museos, ya que podrían variar.
Día de llegada
Si llegás tarde a Ámsterdam lo mejor es aprovechar para dar un paseo por las zonas más importantes de la ciudad. Después de dejar las valijas en el hotel pueden ir hacia la Plaza Dam, el lugar en torno al cual se creó Ámsterdam. En la plaza podrán contemplar algunos edificios históricos entre los que destaca el Palacio Real.
Cruzando el canal por la Calle Damstraat llegarán hasta el pintoresco Barrio Rojo, donde podrán pasear por las calles iluminadas por las luces de neón, mientras las mujeres situadas en los escaparates ofrecen sus servicios.
El Barrio Rojo está repleto de Coffee Shops, bares en los que está legalizada la venta y el consumo de marihuana pero que, curiosamente, no ofrecen alcohol. Podés pasar el resto de la noche paseando y cenar en alguno de los restaurantes de la zona.
Primer día
El primer día comienza con la visita de la Casa de Ana Frank, donde podrán conocer la conmovedora historia de las familias que se ocultaron entre sus paredes para escapar de la persecución nazi.
Después de recorrer la casa, tomar la Calle Prinsengracht hasta la Iglesia Westerkerk. Subiendo a su torre podés disfrutar de las mejores vistas de la ciudad a 85 metros de altura.
Tomando de nuevo la Calle Prinsengracht y girando hacia la derecha en Nieuwe Westerdokstraat llegarás hasta la Estación Central. Enfrente de ésta podrás tomar alguno de los barcos que recorren los canales de Ámsterdam, que es una forma de ver la ciudad desde una perspectiva especial.
Después del paseo en barco deberás tomar la Calle Oudezijds Voorburgwal para llegar hasta Oude Kerk, una iglesia construida en 1302 que se conserva como el edificio más antiguo de la ciudad. En este trayecto podés aprovechar para comer.
Una vez fuera de la iglesia podés visitar el sorprendente Museo Amstelkring, situado en la misma calle. La impresionante iglesia clandestina que esconde el pequeño edificio los dejará boquiabiertos.
Si tenés tiempo suficiente, al salir del museo crucen el canal y atraviesen el conocido Barrio Rojo. Tomar Sint Antoniebreestraat y llegarán hasta el Museo Rembrandt, ubicado en la casa en la que vivió el artista.
Después de empaparse de arte, tomar la calle Waterlooplein y después Staalstraat. Cruzar por Muntplein y llegarán hasta el colorido Mercado de las Flores. Dejando atrás el mercado tomar la Calle Singel para llegar a la Plaza Spui, un lugar ideal para tomar un café, leer un libro o disfrutar de la tranquilidad del barrio.
Antes de abandonar la zona conviene adentrarse durante unos momentos en el agradable Begijnhof, un conjunto de casas elegantes que se creó en 1346 para acoger la hermandad de las beguinas.
Tras recorrer el agradable barrio tomar la Calle Leidsegracht y girar en Lijnbaansgracht para llegar hasta la Plaza Leidseplein, una de las zonas más animadas de la ciudad en la que podés quedarte a cenar.
Segundo día
Cruzando el parque Museumplein llegaréis al Rijksmuseum, uno de los mejores museos de Holanda, famoso por su impresionante colección de cuadros del Siglo de Oro holandés.Hoy conoceremos los dos museos más importantes de Ámsterdam. Comenzaremos el día con una visita al Museo Van Gogh y conoceremos el intrigante mundo en el que se encontraba inmerso el pintor.
Dependiendo del tiempo que tengas y de sus gustos, podés dar un paseo por Vondelpark, un agradable espacio verde habitado por cientos de especies vegetales y animales, o visitar la Heineken Experience, un recorrido a través de la historia y el proceso de fabricación de la famosa cerveza.