En las calles, en el subte, en la cama, al celular siempre escucharás a los italianos diciendo: ¿Qué comemos hoy? En las conversaciones siempre hay un momento dedicado a la gastronomía, a un lugar recién descubierto, a una cena improvisada en casa.
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Fuente: www.recipeitalia.com |
En cada barrio conocí, por recomendación de amigos o de alguna guía, una trattoria o ristorantino para volver. Supe que en Roma hay que probar: pasta, cacio e pepe (queso y pimienta), gelato en Giolitti,carcciofo alla giudia en el Ghetto, pizza romana –es finita, a diferencia de la napolitana– en Il Leoncino, la comida de la abuela –scaloppine–en la Trattoria da Marcello, en San Lorenzo, un barrio joven cerca de Termini, y tiramisú en Pompi, un clásico entre los romanos desde 1962.
Un día, al ver el tamaño del antipasto (entrada) le pedí al mozo, de la Trattoria da Marcello que del primo piatto (primer plato) trajera sólo media porción. Me miró con una mirada que no le vi a Marlon Brando en el primer Padrino y gritó (los dedos en montoncito): ¿Ma cuale è la mezza porzione? Acto seguido, mandó un plato como para tres…
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Fuente: www.recipeitalia.com |
Si vas a Roma en invierno no te pierdas le caldarroste (castañas asadas); en verano, toma grattachecca (hielo raspado y saborizado) y, por supuesto, fettuccine o pennette alla amatriciana.
Cuenta la leyenda que hace años, Rodolfo Valentino llegó hasta los Tribunales para impedir que abriera un local de Mc Donald’s en la Via Condotti. No lo logró, como se puede imaginar, pero da una idea del fanatismo por la buena mesa.
Coordenadas
Giolitti – Via Uffici del Vicario 40 (Fontana di Trevi)
Los helados más famosos de Roma. Tanto, que ya abrieron sucursales en Nueva York y Copenhague. Cuando los romanos pasean por el centro, si es verano, hacen una escala aquí. La copa helada, con chocolate y sambayón, un espectáculo.
Trattoria da Marcello – Via dei Campani 12 (San Lorenzo).
San Lorenzo está afuera de la muralla y a la vez muy cerca de Termini. Al estar a unos pocos kilómetros del centro histórico, los precios bajan notablemente y cambia el paisaje. La mayoría de los clientes son romanos, muchos de ellos vecinos del barrio ya que la cantina está desde 1961. Probar las olivas alla ascolana, la saltimboca alla romana ybucatini con il sugo de coda.
¡¡¡ Gracias por tu comentario !!! Creo que en Italia (como en Argentina) bien vale el dicho «comer y rascar, es todo empezar».
En Florencia una buena «bistecca a la Fiorentina» y luego algún postre y café en Gilli.
Sin duda, en Venecia, café en Florian disfrutando la música y el espectáculo que brindan los turistas asombrados por el embrujo de la ciudad.
En Génova la «Fugassa» y la «Fainá», imperdibles.
Y en Calabria la «Pitta» que es una especie de pan relleno con jamón crudo, ajo, aceitunas y queso.
Y de preferencia en alguna pequeña aldea o pueblito y «bajado» con algún vinito local.
Muy bueno, bella Dulcinea, tu blog.